Ruta por las lagunas de Laguardia.

Recorrer la ruta de las lagunas de Laguardia mientras disfrutamos de un tranquilo paseo con vistas a viñedos, humedales y la Sierra Cantabria se ha convertido en uno de los planes más demandados de la Rioja Alavesa.

La ruta por las lagunas de Laguardia nos lleva a conocer uno de los humedales más importantes de la Rioja Alavesa. Un espacio, que, señalizado a la perfección, nos permite disfrutar del increíble entorno rural que lo rodea mientras estiramos las piernas. Una actividad idónea para realizar tras la visita a alguna bodega o trujal de la Rioja Alavesa. Incluso para bajar la comida degustada en alguno de los múltiples restaurantes que encontramos esparcidos por Laguardia. Y es que, aunque todo el mundo conoce la faceta gastronómica de la Rioja Alavesa, una comarca que representa a la perfección los buenos vinos y la buena comida que encontramos en Euskadi, muchas personas desconocen o pasan por alto que su increíble paisaje es perfecto para practicar deportes como el senderismo o el ciclismo. Un entorno, que, capitaneado por un mar de viñedos, nos proporciona todo tipo de experiencias. Una zona rural, que nos sorprende con pueblos, historia y naturaleza según avanzamos. Y es que, aunque la gran protagonista de este artículo es la ruta por las lagunas de Laguardia, no debemos olvidar que la Rioja Alavesa cuenta con miles de caminos y senderos mediante los que nos invitan a conocer en detalle todos y cada uno de los pueblos que componen esta zona del sur de Euskadi.

Aunque nuestra propuesta es la de recorrer el complejo lagunar de Laguardia por completo, existe la posibilidad de reducir drásticamente la longitud y duración de esta ruta recorriendo únicamente el Prao de la Paul. Un espacio, que, en nuestra opinión, abarca la zona de mayor belleza de este complejo. Si optáis por este último recorrido, decir que se trata de una ruta circular que transcurre en todo momento bajo la atenta mirada de las murallas de Laguardia, junto a la orilla del Prao de la Paul. Un paseo sin dificultad alguna, que puede ser perfecto para las personas que no disponen del tiempo suficiente como para realizar la llamada ruta verde del complejo lagunar de Laguardia.

Esta ruta por las lagunas de Laguardia, nos lleva a recorrer un entorno rural en el que los viñedos y los humedales son los grandes protagonistas. Unos elementos, que transmiten paz y tranquilidad. Las lagunas que rodean Laguardia, las llamadas lagunas estacionales, responden a la cantidad de agua que cae a lo largo del año, por lo que puede que si las visitáis durante un año caluroso, no las encontréis en su mejor momento. Este espacio que forma actualmente parte de la Red Ecológica Europea Natura 2000 y catalogado como Biotopo protegido por el Gobierno Vasco, no solo alberga la ruta que hoy os mostramos, también cuenta con parte del itinerario de la llamada Ruta del Vino y el Pescado (GR-38), un antiguo sendero comercial que unía La Rioja con la costa de Bizkaia. Así que, si creéis que los 12 kilómetros de este recorrido no son suficientes para vosotros, siempre podéis optar por realizar esta Gran Ruta, de Laguardia a Bermeo. Casi nada. Al mismo tiempo, también nos encontramos con tramos del Camino Ignaciano (GR-120), dos rutas de gran recorrido que solo recomendamos a aquellas personas que están en una perfecta forma física.

Ruta: La ruta parte de la laguna conocida como el «Prao de la Paul», el espacio más llamativo de esta ruta. A este punto podemos llegar desde la calle Avenida de la Diputación de Laguardia, un lugar desde el que nos adentramos en una tierra llena de cultivos de vid y cereal. Un pequeño rincón de Laguardia que esconde muchas sorpresas en su interior.Una vez aparcado nuestro vehículo en los aledaños de esta calle, descendemos por una carretera que pronto se convierte en una pista de tierra y piedra. Como podéis apreciar en el mapa que hemos creado, tenemos dos opciones para bajar desde Laguardia a la zona de las lagunas. Ambas igual de prácticas. Todo depende de donde aparquéis vuestro vehículo. En nuestro caso utilizamos la opción «A», la ruta marcada en rojo. Una vez abajo, tras girar a la izquierda, un señal nos indica que hemos llegado a la balsa del Prado de la Paul. Ojo, aunque en un principio pueda parecer que debemos rodear este embalse, no es así. Una vez que hemos recorrido unos metros junto a la balsa, es momento de girar a la derecha, dejando a nuestra espalda la superficie de agua junto a la que hemos caminado. Aunque nosotros proponemos que sigáis hasta llegar a una especie de atalaya o mirador, debeis de tener en cuenta que tras disfrutar de las vistas debemos volver sobre nuestros pasos unos 30 metros hasta el anterior cruce de caminos. Recordad, debemos seguir en todo momento las marcas blancas y azules.Seguimos este nuevo camino siguiendo las indicaciones hasta llegar a la carretera A-124, una vía bastante transitada por la que los coches circulan a gran velocidad, ¡cuidado al cruzar!Al de unos 500 metros aproximadamente, nos encontraremos con otro cruce, si estáis cansados o no tenéis interés en realizar la ruta completa, podéis atajar visitando únicamente 2 de los 3 humedales que encontramos al otro lado de la carretera (Musco y Carralogroño). En nuestro caso, tomamos el camino de la derecha, camino a la laguna de Carravalseca, preparados para completar toda la ruta. Al de 800 metros, volvemos a encontrar otro cruce, en este caso, tomamos el desvío de la izquierda, seguimos junto a la laguna. Estamos en el kilómetro 4 de la ruta.

Tras sobrepasar por completo la laguna Carravalseca giramos a la izquierda, es en este momento cuando las señales rojas y blancas de la gran ruta nos abandonan. Nosotros cambiamos de rumbo, volvemos dirección a Laguardia. Tras andar más menos 800 metros llegamos a la laguna de Musco, un espacio que dejándolo siempre a nuestra izquierda rodeamos 3 /4 partes, llegando así, a un nuevo cruce de caminos. Toca tomar dirección a la laguna de Carralogroño. Tras recorrer el perímetro derecho de esta última balsa de agua volvemos a encontrarnos con la carretera N-232. Pero ojo, no debemos cruzar, tenemos que girar a la derecha y recorrer unos 180 metros antes de hacerlo. Mucho cuidado al cruzar. Nos alejamos de las lagunas para adentrarnos por completo en tierras de cultivo, toca disfrutar de las vistas que nos ofrecen los viñedos. Siguiendo las señales volvemos a alcanzar el primero de los humedales que os hemos presentado, el Prado de la Paúl. Si echamos la vista atrás, nos damos cuenta de que no realizamos la vuelta a este embalse por completo, ya que salimos en mitad del camino que rodea esta superficie de agua. Seguimos el recorrido hasta encontrarnos con una pequeña parcela de tierra que se adentra en el agua, se trata de una caseta de madera que ha sido habilitada para observar a las aves. Seguimos el camino hasta rodear por completo el embalse, llegamos a una zona de ocio con mesas en la que podemos comer o simplemente descansar. En nuestro caso, seguimos la ruta hasta llegar al punto en que la iniciamos. Tocaba disfrutar de un pintxo poteo por Laguardia.

Complejo Lagunar de Laguardia: El complejo lagunar de Laguardia, más conocido como las lagunas de Laguardia, es un Biotopo Protegido que se encuentra muy cerca del núcleo urbano. Un espacio, que, gracias a las grandes zonas de agua que dispone ha conseguido crear un ecosistema rico en fauna y flora. Actualmente, este complejo está formado por 4 humedales: el Prao de la Paul, Musco, Carralogroño y Carravalseca. La primera de ellas, el Prao de la Paul, se trata de un embalse creado sobre un antiguo humedal de Laguardia, un espacio que siempre cuenta con agua. Por otra parte, Musco, Carralogroño y Carravalseca, son 3 lagunas temporales, 3 espacios que no siempre cuentan con agua. Aunque parezca mentira, estas tres últimas son las más especiales histórica y culturalmente hablando, y es que, hoy en día apenas quedan este tipo de espacios hidrológicos entre nosotros. Se trata de espacios conocidos con el nombre técnico de «cubetas endorreicas», unos espacios que carecen de conexión con otros cauces de agua, que no reciben aportes de agua y tampoco ofrecen aportes de agua. Su ciclo depende totalmente de la naturaleza, y es que, su existencia depende de las lluvias que precipiten hasta primavera, estación del año en el que las lluvias empiezan a escasear. A partir de esta época el sol hace que el agua se evapore dejando un blanco rastro tras de sí debido a las sales de sus aguas. Como podéis apreciar, dependiendo de las precipitaciones que se creen a lo largo del año, estas lagunas pueden contar con una notable profundidad o pueden estar prácticamente si agua. Actualmente, este complejo lagunar acoge un sin fin de vida en su interior, destacando de forma notoria la flora. Y es que, las plantas que nos encontramos a nuestro paso, han sido catalogadas como de interés internacional, no solo por ser exclusivas de este entorno, sino porque se han sabido adaptar a la salinidad de este pequeño hábitat. Por otra parte, las aves, utilizan estos espacios como punto de descanso durante sus largas y duras migraciones. Recordad que estamos en el Biotopo protegido del Complejo Lagunar de Laguardia, un lugar, que, gracias a su catalogación como Humedal Internacional del Convenio Ramsar se encuentra protegido y valorado a nivel internacional.

Ubicación: Las lagunas de Laguardia se encuentran a apenas 5 minutos andando de su núcleo urbano. Un espacio natural, que, aun estando muy cerca de uno de los pueblos más visitados de todo Euskadi, apenas se conoce.  El complejo lagunar de Laguardia se encuentra en el sur de Araba, en la comarca de la Rioja Alavesa. Aunque la ruta que os proponemos en este artículo puede realizarse empezando desde diversos puntos, nuestra recomendación es clara, empezar y terminar junto al campo de futbol de Laguardia, una excusa perfecta para fusionar este ruta con otras actividades cercanas al centro urbano de Laguardia.

Cuando: La climatología típica de cada una de las estaciones del año cambia por completo el paisaje que nos aguarda en la ruta del complejo lagunar de Laguardia. Un hecho, que hace que el telón de fondo de esta experiencia por la Rioja Alavesa cambie según avanza el año. La época preferida, suele ser la primavera, cuando las hojas de la vids se tiñen de colores rojizos dejando a todas las personas que nos visitan sin habla. De todas formas, realizar este paseo cuando empiezan a brotar los primeros racimos de uva o cuando los viñedos están totalmente desnudos también hacen muy especial esta ruta.

Avistamiento de aves: Gracias a la gran masa de agua existente en los diferentes humedales que nos encontramos durante la ruta de las lagunas de Laguardia y el ecosistema que se ha desarrollado a ella, actualmente se puede disfrutar de la actividad de avistamiento de aves migratorias. Lo que en términos anglosajones conocemos como “birding”. Para ello, el mejor punto que encontramos durante nuestro itinerario es el Prao de la Paul, y es que, de todos los humedales que nos encontramos junto a Laguardia, este último es el que más vegetación y más agua tiene, facilitando la cría y estancia de las diferentes aves que se dan cita en el interior de Euskadi. Actualmente, existen experiencias orientadas a este tipo de temáticas, os recomendamos preguntar por ellas en la oficina de turismo. De todas formas, si no queréis pagar por ello y tampoco queréis ser esclavos de un horario, os recomendamos que os aventuréis a descubrirlo por vuestros propios medios. Solo es necesario llevar unos prismáticos, apostarse en uno de los diferentes puntos de avistamientos que encontramos repartidos por las lagunas, estar en silencio y tener mucha paciencia. Como consejo, os indicamos que el periodo en el que más aves se pueden observar en Laguardia es entre septiembre y marzo. Los expertos nos indican que entre las especies más llamativas que podemos encontrar en el complejo lagunar de Laguardia se encuentra la garza real, el aguilucho lagunero o la garza imperial.Este espacio nos recordó mucho a otros como Urdaibai Bird Center, lugares que, respetando la naturaleza por completo, nos permiten disfrutar de la belleza de aquellas especies que nos visitan esporádicamente durante la época de migración.

Dónde aparcar: Recomendamos estacionar nuestro vehículo en cualquiera de los parkings que encontramos esparcidos por Laguardia. De todas formas, dada la ubicación de nuestro punto de origen, el parking idóneo para ello sería el que encontramos junto al campo de futbol de la localidad. Si decidís seguir nuestras indicaciones, al terminar la ruta podéis utilizar el ascensor público y gratuito que encontrareis junto al parking para subir hasta el centro de Laguardia.

Qué ver y hacer en Laguardia: Laguardia es uno de los pueblos más bonitos de la Rioja Alavesa, uno de los núcleos urbanos más visitados de todo Euskadi. Una villa amurallada, que, gracias a la buena conservación de sus elementos arquitectónicos, nos hace viajar hasta la Edad Media cada vez que lo visitamos. Las calles que forman su centro urbano, estrechas, empedradas y cortas, forman un pequeño laberinto por el que discurrir mientras descubrimos rincones llenos de encanto. No os perdáis la iglesia de Santa Maria, la Torre Abacial y la visita a alguna de las pocas bodegas que aun hoy resisten en el subsuelo del centro del pueblo.

Estos espacios no son más que una pequeña representación de todo lo que podemos ver y hacer en la Rioja Alavesa. Una tierra rica en cultura e historia, que nos invita a recorrer sus pueblos en busca de diferentes reclamos.

Bodegas: La elaboración de vino, cuenta en esta zona de Araba con una gran tradición e historia a sus espaldas. Un hecho, que hace que la visita a las diferentes bodegas que forman la Denominación de Origen Rioja, sea prácticamente una obligación. ¿Qué sería de la Rioja Alavesa, sin sus extensos viñedos, sus bodegas y sin sus prestigiosos caldos? Por nuestra parte, os animamos a que visitéis diferentes tipos de bodegas, familiares, tradicionales, modernas…Aunque parezca mentira, aunque todas ellas cuenten con excelentes vinos, la forma de elaboración y forma de explotar los viñedos varía dependiendo el tipo de bodega que visitemos. Os proporcionamos 3 ejemplos muy claros, 3 bodegas que ya mencionamos en nuestro artículo de «las mejores bodegas de la Rioja Alavesa«.

Esperamos que estas bodegas os gusten tanto como nos gustaron a nosotros. No tienen desperdicio alguno. De todas formas, podéis dejarnos vuestras propias sugerencias en este artículo, estamos abiertos a todo tipo de experiencias.

Dónde dormir: La Rioja Alavesa cuenta con diferentes establecimientos donde poder descansar tras un intenso día repleto de experiencias. En este caso, os recomendamos un pequeño y coqueto hotel familiar ubicado en Samaniego, La casona de Alutiz. Llegados a este punto, puede que os preguntéis por que no dormir en alguno de los establecimientos de Laguardia, sencillo, Alutiz cuenta con una de las mejores relaciones calidad precio de la zona. Un establecimiento hotelero, que, regentado por la misma familia que encontramos en la bodega Alutiz, nos ofrece una estancia muy comoda.

 Otras rutas familiares en Euskadi: Euskadi, tierra de enorme belleza paisajística, nos invita a recorrer cada uno de sus pequeños «txokos» (rincones en euskera), durante nuestra estancia. Un tipo de experiencias que cada vez está captando más adeptos entre todas las personas que nos leéis. Todas y cada una de las rutas que os mostramos a continuación, cuentan con una muy buena relación esfuerzo – recompensa, haciendo que realmente merezca la pena caminar cada metro que las forma.

Como habéis podido comprobar por las fotos, todas ellas cuentan con sus propios atractivos. Ahora solo os falta seleccionar una de ellas. Todo depende de vuestros gustos, nivel físico y ganas. ¡A disfrutar!

Video: Una vez más hemos querido subir a nuestro canal de YouTube un pequeño video que muestra lo que nos encontramos durante la ruta por las lagunas de Laguardia. Un pequeño audiovisual, mediante el cual os animamos a seguir nuestros pasos y conocer en detalle cada uno de los espacios que forma el llamado complejo lagunar de Laguardia. Además, si queréis seguir de cerca nuestras aventuras por todo Euskal Herria, os recomendamos que os suscribáis a nuestro canal de YouTube, en el encontrareis videos que os encantaran y que os ayudaran a elegir vuestro próximo destino.

Como habéis podido comprobar, la ruta de las lagunas de Laguardia es un plan perfecto para aquellas personas que están planificando una escapada a la Rioja Alavesa. Una experiencia saludable y muy interesante que os recomendamos fusionar con la visita a una bodega, la visita a un trujal o la degustación de los platos típicos de la zona. Estamos seguros de que os encantara. Un plan redondo. Por cierto, no olvidéis disfrutar de la villa de Laguardia, uno de los complejos urbanos más impresionantes de todo Euskadi. ¡Esperamos vuestros comentarios!